Cómo prevenir la artrosis y en caso de padecerla cómo tratarla de manera efectiva
La artrosis es una patología degenerativa de los huesos que comienza por la destrucción o pérdida gradual del cartílago articular, y que afecta no solo a la superficie articular cartilaginosa sino también a todo el complejo articular, ligamentos, tendones meniscos.
Para comprender en qué consiste esta enfermedad, hay que comprender cómo funciona el cartílago articular y qué función cumple. Por ello a continuación se explicará brevemente:
El cartílago articular tiene como función amortiguar las fuerzas en los extremos de los huesos y al ser un material con bajo coeficiente de rozamiento también permite el desplazamiento de los huesos entre sí, disminuyendo el desgaste en la articulación.
Pero cuando el cartílago articular se degenera por diferentes causas, aumenta la fricción los extremos de los huesos, aumentando las fuerzas de rozamiento y empezando la degeneración de las diferentes estructuras de la articulación. En casos más avanzados se desprenden pequeños trozos del cartílago, lo que aumenta el roce y la fricción, se degeneran los meniscos y se ve afectado todos los componentes peri-articulares como músculos tendones capsular articular.
Si bien son varios los factores que inciden en la aparición de esta enfermedad, entre ellos encontramos la edad. Una persona con una edad superior a 45 años es más propensa a padecer artrosis. También influye el sexo, porque a pesar de ser una enfermedad que aparece tanto en hombres como en mujeres, en las mujeres se manifiesta a una edad más temprana.
¿Cómo prevenir y evitar llegar a esa instancia de degeneración?
- Incorporar buenos hábitos en la dieta y evitar el sedentarismo.
- Disminuir la carga de objetos pesados en caso de no estar en condiciones físicas para realizarlo.
- Mantener un peso corporal sano para no sobreexigir a las articulaciones sobre todo de las rodillas y cadera.
En caso de padecer la enfermedad, ten en cuenta estos consejos:
- Evita el movimiento que te produzca dolor y utiliza otras articulaciones que no padezcan de esta enfermedad. Pero no te sobre exijas.
- Realiza ejercicio con movimiento suaves y en períodos cortos sin que haya un movimiento excesivo en tiempo o intensidad, porque puede ser perjudicial.
- Puedes utilizar muletas o bastón en algunos momentos del día para no exigir mucho la articulación afectada, pero no hagas uso cotidiano pues sino la articulación se acostumbrara y perderás movilidad.
- Se recomienda usar frío o calor localizado en la zona, ya que esto puede aliviar el dolor y permitir el movimiento.
Si presentas dolor articular frecuente, recurre a un médico para diagnosticar y tratar lo antes posible esta enfermedad.