El desarrollo del lenguaje en los niños bilingües
Todas las personas pueden aprender a hablar otro idioma, si bien a algunas les resulta más fácil que a otras, todos pueden lograrlo. Se considera bilingües a las personas que pueden hablar bien dos idiomas.
Según La Asociación Americana del Habla, Lenguaje y Audición ( ASHA ), los niños, pueden aprender a ser bilingües por la experiencia vivida en el hogar, en la escuela, o en la comunidad. Algunos niños aprenden muy bien ambos idiomas, pero la mayoría aprende un idioma mejor que el otro, siendo así su lenguaje dominante. Lo que no quiere decir que toda su vida sea así, este lenguaje dominante puede cambiar con el transcurso del tiempo, especialmente si el niño no lo utiliza con regularidad.
¿Cómo puedo enseñar a mi niño a ser bilingüe?
- Usar dos idiomas desde el principio. Por ejemplo, uno de los padres puede usar un idioma mientras que el otro padre usa otro.
- Otra manera de hacerlo es usar solo un idioma en el hogar. El niño puede aprender su segundo idioma al comenzar la escuela.
- Proporciona a tu niño tantas oportunidades como sea posible de escuchar y practicar ambos idiomas en su vida diaria.
- Es mejor no usar ambos idiomas en la misma oración ya que puede resultar complejo al niño distinguir entre los idiomas.
¿Puede causar problemas de habla o lenguaje el aprendizaje de dos idiomas?
No. En el mundo entero, los niños aprenden más de un idioma y no por eso tienen consecuencias en el habla o lenguaje. Los niños bilingües desarrollan su destreza de lenguaje del mismo modo que lo hacen los demás niños.
¿Qué debo esperar cuando mi niño aprende más de un idioma?
Cada niño bilingüe es especial y desarrolla el lenguaje a su manera. Pero en general, el aprendizaje de dos idiomas tarda un poco más que el aprendizaje de uno sólo.
Al igual que los demás niños, la mayoría de los niños bilingües dicen sus primeras palabras cuando cumplen el primer año; por ejemplo, “mamá” o “papá”. Cuando cumplen dos años, la mayoría de los niños bilingües puede usar frases de dos palabras; por ejemplo, “mi pelota” o “jugo no”.
El niño se puede confundir de vez en cuando. Se puede equivocar en la gramática, o puede usar palabras de ambos idiomas en la misma oración. Esto es normal y debe desaparecer poco a poco a medida que desarrolla sus destrezas de lenguaje.
Cuando se introduce un segundo idioma, es posible que algunos niños no hablen mucho durante un tiempo. Este “período de silencio” puede durar desde unos meses hasta un año. No lo olvides, esto es normal y desaparece con el transcurso del tiempo.