¿Vacunas sí o vacunas no?

En los últimos años el debate sobre las vacunas ha ganado protagonismo y muchas familias han decidido no vacunar a sus hijos. Muchas veces con pocos fundamentos, e incluso carentes de información, esta decisión que pareciera ser individual y äfectar” únicamente a esa familia… termina afectando a todo un estado e incluso un país.

Pues sucede que en la actualidad la erradicación de muchas enfermedades, incluso letales en algunos casos, han desaparecido no por arte de magia sino por el crecimiento exponencial de la medicina que ha encontrado cómo combatirlas. Las bacterias, las enfermedades siguen allí… lo que ha cambiado resulta ser la armadura del organismo con que el ser humano se protege. Y cuando esto se pone en juego… pues lamentablemente afloran problemáticas que se tenían controladas y dormidas…

Crisis de Sarampión en Nueva York

«Esta epidemia es alimentada por un pequeño grupo anti-vacunas en estos barrios. Han estado dispersando información errónea y peligrosa basadas en falsa ciencia»

Comenta la comisionada de Salud de Nueva York, la pediatra Oxiris Barbot.

El sarampión, altamente contagioso, fue declarado oficialmente erradicado de Estados Unidos en el año 2000. Pero en lo que va de 2019 se han registrado 465 casos de sarampión en 19 estados del país, según las últimas cifras de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).

Hasta ahora se han confirmado 285 casos de sarampión desde el comienzo de la epidemia en octubre, la gran mayoría niños y adolescentes (246 casos) que no fueron vacunados, pero no se han registrado muertes.

Pues la pregunta del debate, es: ¿Vacunas sí, o vacunas no?

• Las enfermedades graves aún existen. Están allí. Al acecho. Vacunas sí. Las vacunas son uno de los principales logros de salud pública porque han reducido o incluso eliminado muchas enfermedades. Gracias a ellas muchas familias no han conocido ni lo harán las consecuencias devastadoras enfermedades como: la poliomielitis, el sarampión o la tosferina (pertussis).

• Vacunas sí. Son la opción segura para la salud de todos. En la actualidad, los Estados Unidos cuentan con el suministro de vacunas más seguras de su historia. Antes de que una vacuna sea aprobada y administrada a los niños, se hacen muchas pruebas. Los científicos y profesionales médicos evalúan cuidadosamente toda la información disponible acerca de la vacuna para determinar su seguridad y eficacia. A medida que se obtiene nueva información y datos científicos, se actualizan las recomendaciones sobre la vacuna.

• Los niños necesitan de las vacunas para proteger su sistema inmunológico en desarrollo. Para que los niños tengan todas las vacunas, deben recibir todas las dosis según el calendario de vacunación recomendado. Si su hijo no recibe todas las dosis, está en peligro de contraer enfermedades graves.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) establecen el calendario de vacunación infantil para los EE. UU. con base en las recomendaciones del Comité Asesor sobre Prácticas de Vacunación (ACIP), un grupo de expertos médicos y de salud pública.

La responsabilidad es enorme e implica a todos. Antes de tomar cualquier decisión hablar con el médico de cabecera resulta la mejor opción para asesorarse y evacuar todas las dudas.