Cómo ayudar a alguien con depresión: qué decir y qué no decir
Cuando un miembro de la familia o un amigo sufre de depresión, tu apoyo y estímulo puede desempeñar un papel importante en su recuperación. Sin embargo, la depresión también puede desgastarte si descuidas tus propias necesidades.
Lo primero y principal es comprender la depresión:
La depresión es una enfermedad grave. No debes subestimarla. La depresión drena la energía, el optimismo y la motivación de una persona, y ese ser querido simplemente no puede “salirse” por pura fuerza de voluntad.
Los síntomas de la depresión hace que sea difícil para una persona conectarse en un nivel emocional profundo con cualquier persona, incluso con aquellas personas que él o ella ama. Además, las personas deprimidas a menudo dicen cosas dañinas y atacan con ira. Recuerda que esa es la depresión hablando, no es sí tu ser querido, así que trata en lo posible de no tomártelo muy personal.
Esconder el problema no lo hará desaparecer, y no ayudas a nadie si inventas excusas, o mientes para cubrir a un amigo o miembro de la familia que está deprimido. De hecho, esto puede evitar que la persona deprimida busque tratamiento.
No se puede “arreglar” la depresión de otra persona. No trates de rescatar a tu ser querido de la depresión, porque no depende de ti arreglar la situación. Tampoco debes sentirte culpable por la depresión de tu ser querido o responsable de su felicidad (o falta de ella). En última instancia, la recuperación está en manos de la persona deprimida.
Lo que PUEDES decir que sí ayuda:
- No estás solo en esto. Estoy aquí para ti.
- Puede que no lo creas ahora, pero la forma en que te sientes cambiará.
- Tal vez no pueda entender exactamente cómo te sientes, pero me preocupo por ti y quiero ayudarte.
- Cuando quieras darte por vencido, debes decirte: “aguanto un día, hora, minuto más”; el tiempo que sea que pueda manejar.
- Tú eres importante para mi. Tu vida es importante para mí.
- Dime qué puedo hacer ahora para ayudarte.
Lo que DEBES EVITAR decir:
- Todo está en tu cabeza.
- Todos pasamos por momentos como ese.
- Mira el lado bueno.
- Tienes tanto por qué vivir ¿por qué quieres morir?
- No puedo hacer nada por tu situación.
- Simplemente salte de ella.
- ¿Qué sucede contigo?
- ¿No deberías estar mejor ahora?
Fuente: The Depression and Bipolar Support Alliance
Cuídate a ti mismo
Hay un impulso natural para querer arreglar los problemas de las personas que amamos, pero no se puede controlar la depresión de un ser querido. Sin embargo, puedes controlar cuán bien te cuidas. Es tan importante para ti mantenerte saludable como lo es para la persona deprimida recibir tratamiento, así que intenta lo más posible en priorizar tu bienestar.
Asegúrese de que tu propia salud y felicidad son sólidas antes de tratar de ayudar a alguien que está deprimido, ya que cuando tus propias necesidades son atendidas, tendrás la energía necesarias para ofrecer una mano.
Si de veras estás muy preocupado por una persona que está pasando por una crisis o que piensa en suicidarse, puedes contactarte con La Red Nacional de Prevención del Suicidio. Una persona calificada del centro podrá ayudarte.
El número para español es el 1-888-628-9454.
- Las llamadas son gratuitas desde cualquier teléfono en los Estados Unidos.
- Las líneas funcionan las 24 horas todos los días de la semana, de modo que puedes ponerte en contacto con una persona capacitada en cualquier momento en que lo necesites.
- Tu llamada es confidencial; esto significa que la persona que le escucha no divulgará tu identidad.
Para más información visita La Red Nacional de Prevención del Suicidio.