Harris y Trump, dos candidatos, dos puntos de vista opuestos

De aquí hasta las elecciones presidenciales del 5 de noviembre, en la Red Hispana haremos una serie de artículos en los que destacaremos los puntos de vista de Donald Trump y Kamala Harris en temas cruciales para el país. El objetivo es que cuando usted salga a votar lo haga bien informado.

El mes de julio trajo a los simpatizantes del Partido Demócrata un poco de alivio con la renuncia del presidente Joe Biden a competir por un segundo mandato luego de su desastrosa actuación en el debate frente al candidato republicano Donald Trump.

Después del atentado fallido en su contra, la nominación de James David Vance como su compañero de fórmula, la candidatura de Trump parecía un tren a toda velocidad encaminándose a la Casa Blanca prácticamente sin oposición.

Y entonces las cosas cambiaron radicalmente con el anuncio de que la vicepresidenta Kamala Harris tomaría el relevo y buscaría la nominación de su partido en la Convención Nacional Demócrata que se llevaría a cabo en Chicago, entre el 19 y el 22 de agosto.

No fue necesario esperar hasta ese momento, ya que dos semanas antes logró reunir los delegados suficientes para hacerse de la candidatura y enfrentar, ahora sí, a Donald Trump.

Sin lugar a dudas la llegada a la presidencia de Donald Trump en el 2016 provocó una profunda reestructuración del Partido Republicano llevándolo a posiciones cada vez más alejadas del centro político y por supuesto más lejanas a las de los Demócratas.

Independientemente de que un candidato o candidata nos caiga mejor que otro, lo importante es que cada uno representa una plataforma política que, de llegar al poder, buscarán imponerla al resto de la sociedad.

El resultado es que hoy tenemos dos visiones del país radicalmente opuestas, y por eso es importante que al votar tengamos en cuenta no sólo lo que es mejor para nosotros de manera individual o familiar, sino también para el resto de la sociedad.

Sabemos que en tiempos de campaña la retórica es muy estridente y que se hacen promesas o amenazas que muchas veces no son realistas. Pero como dicen los refranes populares, cuando el río suena es porque agua lleva y entonces, lo que parecían “simples promesas” de campaña pueden convertirse en realidad con profundas y desastrosas consecuencias.

Cuando salga a votar recuerde que usted no sólo lleva su propia voz, sino también la de millones de personas que por su estatus no puede ejercer el derecho voto, pero que como usted y como yo, llegaron a este país para trabajar y conseguir una mejor calidad de vida para el/ella y su familia.

Los invito a revisar detenidamente las posiciones políticas de los candidatos para que a partir de eso ejerzan su derecho al voto.

El derecho de las mujeres a decidir y la prohibición del aborto

HARRIS: La vicepresidenta ha pedido al Congreso que apruebe una legislación que garantice en la ley federal el acceso al aborto, un derecho que se mantuvo durante casi 50 años antes de ser anulado por la Corte Suprema.

Harris ha criticado las prohibiciones del aborto en los estados controlados por los republicanos y ha prometido, como presidenta, bloquear cualquier posible prohibición a nivel nacional en caso de que se apruebe un futuro Congreso dirigido por el Partido Republicano.

Harris fue la defensora más visible del derecho a decidir de las mujeres. Ella ha promovido las medidas para proteger a las mujeres que viajan para practicarse abortos y limitar la forma en que las fuerzas del orden recopilan los registros médicos.

TRUMP: El expresidente a menudo se ha jactado de conocer de nombre a los jueces de la Corte Suprema que anularon Roe v. Wade, poniendo fin al derecho constitucional al aborto.

Al preguntársele directamente cuál era su posición en torno a este tema, en primavera dijo que las decisiones sobre el acceso y los límites deberían dejarse en manos de los estados.

Dijo que no firmaría una ley nacional para prohibir el aborto. Pero se ha negado a decir si intentaría limitar el acceso a la píldora abortiva mifepristona.

En una entrevista con la revista Time dijo que debería dejarse en manos de los estados determinar si se debe enjuiciar a las mujeres por abortos.

En otros artículos revisaremos las propuestas en temas como inmigración, economía e impuestos, entre otros.