Sabor hispano: Inmigrante peruano triunfa con la comida Nikkei
Eduardo Chang lleva la fusión de dos culturas en la sangre. Es uno de los más de 200.000 peruanos que tiene ascendencia japonesa. A esa mezcla se le llama Nikkei.
En honor a su ascendencia y con muchísimo esfuerzo junto a su esposa, abrieron el restaurante Sushi Nikkei, en donde le han apostado a la fusión de la comida japonesa con la sazón peruana.
“No tenemos el sushi tradicional, el que se puede encontrar en cualquier restaurante japonés”, dice Chang. “En cambio tenemos sushi con la sazón e ingredientes peruanos y eso hace una gran diferencia”, dice satisfecho.
“Aunque algunos clientes se desaniman cuando ven que no ofrecemos los platos tradicionales, les invitamos a que prueben y el resultado es que vuelven una y otra vez, pero sobre todo y más importante, es que nos recomiendan con familiares y amigos”.
Un largo trayecto
En el 2007 para conocer la cultura de sus ancestros, Chang entonces de 22 años viajó con su hermano a Japón. Allá trabajó en las fábricas de Honda y Nissan hasta que en el 2018 decidió regresar al Perú.
Como siempre le había gustado la cocina, con el dinero que ahorró en el país del Sol Naciente, se pagó sus estudios en la escuela de gastronomía Cordón Bleu de Lima y a la par empezó a preparar sushi en un restaurante en el que permaneció siete años.
Entonces abrió su propio restaurante en Lima llamado Yume.
Pero para que el restaurante Sushi Nikkei en Estados Unidos fuera una realidad tenían que pasar muchas cosas.
Entre ellas, que Eduardo se reencontrara con su esposa quien había sido su compañera de escuela y vivía en Estados Unidos desde hacía más de dos décadas.
Y como dicen que el amor lo puede todo, Eduardo decidió mudarse a Estados Unidos, dejando atrás el restaurante que tenía con su familia.
Hace seis años se casaron y decidieron que querían construir aquí su propio patrimonio.
Pero mudarse significaba empezar de cero en Estados Unidos. Y eso hizo. Para ello aprovechó que ya tenía conocimientos de cocina. “Ni modo, tuve que volver a ser empleado y lavar el arroz”, dice con una sonrisa nostálgica. “Pero de todas las experiencias se aprende, especialmente cuando se trabaja con gente con más experiencia que uno”.
Con la idea ya anidada en nuestras cabezas, su esposa y él empezaron a ahorrar para llevar a cabo su propio proyecto.
Pero una cosa es tener la idea y otra es llevarla a cabo, especialmente cuando no se tienen grandes sumas de dinero para invertir y un historial poco conocido. “Ahorramos durante tres años y cuando tuvimos el capital necesario nos lanzamos a buscar un local”, dice Chang.
Y ahí es donde empezó la lucha.
Porque los locales para restaurantes generalmente requieren un plan de gran envergadura que respalde la inversión, por lo que en muchas de las ubicaciones que intentaron rentar fueron rechazados.
Pero siempre hay una puerta que se abre.
Encontraron un local en el que el intermediario era el dueño y él decidió confiar en la apuesta de Chang y su esposa.
“Le contamos todo el proyecto y el dueño al final dijo me encanta el sushi”.
El restaurante abrió en enero del 2021 apenas saliendo de la pandemia.
“Desde el primer día teníamos líneas para entrar”, dice Chang.
¿Cuál fue la clave para ese éxito inmediato?
“Sin duda que la comunidad está muy atenta a lo que está ocurriendo en el ámbito culinario, pero sobre todo a la gran presencia que hicimos en las redes sociales y en la publicidad boca a boca”.
Y la calidad y la originalidad siempre paga.
En septiembre de ese año fueron mencionados en la guía Michelin. “No sabíamos nada, fue una verdadera sorpresa”, dice Chang
Y eso provocó llenos totales en los siguientes meses.
¿No es igual a un restaurante de sushi?
No. Somos un sushi, pero con sabores peruanos y sabores latinos. Tenemos jalapeño, ají peruano, chimichurri típico de Argentina. Y vamos haciendo esta fusión del sushi. No tenemos el California roll por ejemplo, no tenemos los rollos tradicionales. Todos los hacemos a nuestra manera”.
Y ha funcionado.
“Al principio llegaban los clientes que les gusta el sushi tradicional y no estaban seguros de querer probar nuestra propuesta, pero poco a poco los fuimos convenciendo y ahora son clientes habituales nuestros”.
El esfuerzo ha dado sus resultados.
Actualmente Chang y su esposa cuentan ya con dos sucursales y la suerte parece sonreírles.
¿Qué ha sido lo más difícil?
Creo que, en todo restaurante, en todo emprendimiento gastronómico, el tema más importante es encontrar al personal adecuado. Encontrar manos calificadas es un poquito complicado. Pero hay que buscar, hay que enseñarles a los chicos como tienen que trabajar y los valores de honestidad, puntualidad y respeto que esperamos de ellos”.
¿Qué hay para el futuro?
“Estamos evaluando la posibilidad de abrir un tercer restaurante e ir desarrollando nuestra marca y concepto para llevarlo a todas partes, pero sabemos que tenemos que ir poco a poco”.
¿Cuál es el consejo para otros emprendedores?
“Que hay que ir paso a paso, creciendo poco a poco, afianzar lo que se tiene y poner atención a la calidad y al personal. Hay que recordar que el tema del restaurante siempre es un sube y baja, hay temporadas buenas y temporadas bajas. Lo importante es tener resiliencia”.
Sushi Nikkei es uno de los 17 restaurantes que participarán en la Semana de los Restaurantes Latinos de Long Beach, CA, que se va a llevar a cabo del 29 de septiembre al 5 de octubre. Si está por el sur de California, acuda y apoye a estos emprendedores.