Columna: Los siete pilares para una vida saludable
Por Dr. Carlos Jaramillo
El comienzo de un nuevo año viene cargado de propósitos y pedidos al universo. Vivimos la vida atravesando esa frontera invisible entre un año y otro de manera inercial, casi como una roca que cae de la montaña sin detenerse ni un instante, por eso quiero invitarte a que pares por un momento y pienses cómo estás y que evalúes si llevas una vida saludable.
En este inicio de año quiero hacerte un regalo especial presentándote los siete grandes pilares de la salud, la de todos, pero fundamentalmente, la tuya.
El primero de ellos se basa en la alimentación, el segundo en realizar actividad física que incluya pesas y ejercicios cardiovasculares o aeróbicos y de flexibilidad y movimiento, el tercero en tener una rutina e higiene de sueño adecuada, el cuarto pilar es la meditación, la autoconciencia, el mindfulness o una práctica de serenidad y observación, el quinto se trata del manejo de la relación con tus creencias, con tus emociones, con la forma de observar el mundo y de relacionarnos con los demás. El sexto es el conocimiento sobre la exposición a tóxicos ya sea alimentarios, los que aplico en el cuerpo y de los cuales desconozco su procedencia o los que uso en la limpieza del hogar, quizás este punto puede sonar exagerado, pero ignorar estas cosas no quiere decir que no nos estén haciendo daño. El séptimo y último pilar es aplicar todo esto dentro de un marco de disciplina sin que se convierta en algo obsesivo y extremista.
Para una vida saludable no hay recetas mágicas
Es importante hacer una autoevaluación bimestral o trimestral de cómo sientes que están estos pilares asignándoles un porcentaje a cada uno de ellos, siempre teniendo en cuenta que es como una cometa que tiene que tener todas las puntas en equilibrio para elevarse ya que, si una es más corta, no vuela. Así puedes ir construyendo tu vida sin prisa porque no se trata de grandes cambios repentinos sino de un día a la vez, ir avanzando poco a poco, haciendo una pequeña modificación sobre tu salud que te permita construir un cambio de identidad.
Actualmente la mayoría de las personas viven tratando de obtener ese bienestar de manera mágica y rápida, comprando suplementos porque ven en redes sociales a alguno de estos “gurúes de la salud” que les dicen que con ese producto van a curar todos los males de su vida. Es importante destacar que no existe un solo suplemento, medicamento, hierba o gota que logren una solución milagrosa, la salud es algo que se construye de manera integral y transversal, tejiendo entre sí y poco a poco múltiples cosas.
Las diferentes proteínas
Hay algo fundamental a lo que deberíamos prestarle atención todos los días y es al consumo adecuado de proteínas. Cuando vemos a alguien comprar una proteína en polvo pensamos que es un suplemento peligrosísimo que está relacionado únicamente al mundo de los gimnasios y esto no es así. De los tres macronutrientes: grasas, carbohidratos y proteínas, este último es el nutriente más importante y el que deberías garantizar a tu cuerpo todos los días. Se estima que más del 50% de la población en el mundo no consume las cantidades adecuadas de proteína, no solamente por no tener acceso económico a ella sino porque no se tiene consciencia sobre la cantidad necesaria.
Las mejores proteínas provienen de las carnes animales, de los lácteos, del huevo, de las leguminosas, de las nueces y de los hongos mientras que las proteínas en polvo, las de caldo de huesos o las de fuentes vegetales, como la proteína de arroz o de soya son complementarias a una sana alimentación.
La proteína en polvo lejos está de producir daños a los riñones ya que aportan más o menos entre 18 y 25 gramos de proteína mientras que un pedazo de carne oscila fácilmente entre los 40 o 50 gramos. Estas proteínas son una fuente absolutamente genial que pueden acompañar una sana alimentación.
Aquellos que eligen una dieta vegetal como los vegetarianos o los veganos y que por supuesto no consiguen las cantidades adecuadas de proteínas desde los alimentos, sí deberían consumir de manera regular y sistemática, polvo de proteína de buenas y variadas fuentes.
En resumen, aunque es una opción absolutamente adecuada y segura no es necesario el uso de complementos si uno tiene una alimentación consciente y está cumpliendo con los requerimientos adecuados de proteínas cuya cantidad necesaria se obtiene multiplicando el peso actual de tu cuerpo por 1,5.
Seguiremos hablando sobre los pilares restantes. Tenemos mucho trabajo por delante…
En el mes de marzo estaremos en Miami dando la primera de una serie de conferencias que se impartirán en diferentes ciudades de todo el país. Me gusta poder interactuar con la gente y compartir de manera presencial todos los temas que tanto me apasionan.
Carlos Jaramillo es un reconocido médico y conferencista colombiano autor de libros como ‘El milagro metabólico’, ‘Como’ y El milagro antiestrés, entre otros. Busque su columna en la Red Hispana cada dos semanas.