Trucos para lograr hacer más ejercicio
Empezar a hacer ejercicio puede ser muy difícil sobretodo cuando no tienes el tiempo, o aún peor, la motivación. Está claro que hacer ejercicio significa cosas muy diferentes para cada persona, pero te invitamos a que consideres el ejercicio como simplemente un intento deliberado de moverte más vigorosamente de lo habitual. De esta manera, no importa qué tan ocupado estés, o qué tan pocas ganas tengas de “hacer ejercicio”, ya que siempre hay algo que puedes hacer.
MEDIO DE TRANSPORTE
Usar nuestro cuerpo como fuente de energía para movilizarnos a algún lado no sólo es bueno para el medio ambiente, sino que es un ejercicio increíble para nuestro cuerpo y mente.
Si tienes la posibilidad de caminar o usar una bicicleta para visitar a tu familia o amigos, ¡hazlo! Tener una meta por la cual salir y hacer ejercicio puede ayudar mucho en el proceso de motivación.
ALIADOS
Es muy bueno tener un compañero como aliado. Pueden ser tus perritos, tus niños, tu pareja, una amiga o vecina… ¡las posibilidades son infinitas! Lo cierto es que tener a alguien más ayuda mucho con la motivación. Puedes unirte a un grupo que realiza una actividad semanalmente, y ya verás que sentir que alguien espera por tí ayuda mucho.
DE A POCO PERO CONSTANTE
A veces empezamos entusiasmados a hacer ejercicio, y muy pronto se nos van las ganas. Lo cierto es que lo más importante es mantenerlo, y ser constante. Empieza con un día por semana y crea la rutina. Avanza lentamente, así le das tiempo a tu cuerpo a que se acostumbre de a poco.
LA RUTINA COMO AMIGA
Es tan importante incorporar el espacio para realizar alguna actividad en tu día. Tener una rutina es complicado porque a veces nuestros compromisos cambian de semana a semana, o incluso de día a día, pero puedes proponerte en principio una meta pequeña, como por ejemplo ir al parque una vez por semana, todos los lunes. Y si un lunes no puedes, intenta al día siguiente, para compensarlo.
SIEMPRE LISTO
Ponerse ropa para hacer ejercicio puede ser un gran motivador. Sin pensarlo demasiado, ponte la ropa para hacer ejercicio, y ¡verás que funciona!
EN LA COCINA
Mientras esperas que el agua hierva para un té o café, o si le faltan 15 minutos a la comida en el horno, usa ese tiempo para hacer algo de ejercicio, como por ejemplo flexiones y sentadillas o incluso saltar en el lugar.
DIVERSIÓN
Piensa en el ejercicio, como una actividad divertida. Algo que incluso puedes hacer con toda tu familia: saltar la soga, jugar al fútbol, a la mancha o incluso a las escondidas. Cualquier deporte brinda formas entretenidas de mover nuestros cuerpos y de pasar tiempo de calidad con otras personas, reforzando vínculos.